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Daniel Clowes

Hablar de Daniel Clowes es hablar del David Lynch del mundo de los cómics, y en concreto del cómic independiente americano. Este dibujante nacido en Chicago ha ido ganándose poco a poco la fama de artista surrealista y perturbado, gracias a su personalísimo estilo y su interminable lista de personajes extraños.

Clowes empezó a ser respetado entre los lectores de cómic underground por la colección "Eightball", conocida en nuestro país como "Bolaocho", en la que el dibujante daba salida a sus creaciones más personales.

En este cómic se reunían varias historias sobre diferentes temas, aunque con un nexo común: el retrato salvaje de una sociedad repleta de seres desesperados y en su mayoría indeseables. Fue en "Bolaochol" donde Clowes comenzó a publicar por entregas una de las obras que más prestigio le ha dado, la inquietante "Como un Guante de Seda forjado en Hierro".

Esta historia de violencia, sectas y snuff movies nos muestra la parte más oscura y aterradora de la sociedad americana, a través de los ojos de un joven que busca a su novia desaparecida. En este innovador cómic, Clowes renuncia a seguir una línea argumental concreta, y prefiere apoyarse en su talento como dibujante para crear una atmósfera irreal y caótica, que descoloca al lector desde la primera página hasta la última.

Habiendo explotado su lado más surrealista y sádico, el dibujante centró sus esfuerzos en un nuevo cómic, "Pussey!". El protagonista es un dibujante de cómics de superhéroes al que Clowes retrata como un hombre ingenuo y muchas veces estúpido, adicto a la ciencia-fición y encerrado en sus propias fantasías.

La finalidad de "Pussey!" es criticar duramente a la propia industria del cómic, y para ello el autor no duda en ridiculizar a todos los que participan en ese peculiar mundo, ya sean editores, dibujantes o coleccionistas, a través de un dibujo caricaturesco y unos diálogos bastante corrosivos.

Clowes se centra sobre todo en los autores de cómics de superhéroes y los reduce a una panda de seres inmaduros y patéticos, aunque también tiene tiempo para reirse de las miserias del cómic independiente, ambiente del que proviene y que conoce a la perfección.

De las páginas de "Eightball" proviene también "Ghost World", obra que confirma definitivamente a Clowes como un gran creador de historias, aparte de dibujante. "Ghost World" cuenta la historia de amistad de dos chicas adolescentes, Enid y Rebecca, en el momento más difícil de sus vidas, justo cuando están comenzando a hacerse adultas.

Ambas se burlan del mundo que les rodea y sienten curiosidad por los personajes más extraños y peligrosos, en un continuo esfuerzo por rebelarse y ser diferentes.

Las charlas entre las dos protagonistas son el hilo conductor de toda la historia, en la cual Clowes se olvida de su faceta más oscura y se centra en retratar de forma tierna el personal mundo de sus heroínas.

El mayor éxito de este cómic es que el autor consigue crear una extraña relación entre el lector y sus personajes principales, una relación que en un principio es curiosidad y al final se convierte en complicidad. La adaptación a la gran pantalla de "Ghost World" está casi terminada, y el propio Clowes se ha encargado de escribir el guión para que la película no pierda la particular visión del mundo adolescente que hay en el cómic.

Actualmente la colección "Eightball" continúa publicándose en Estados Unidos, cada vez con mayor éxito de ventas gracias a la reciente popularidad de su creador. Y aún tiene tiempo para compaginar los cómics con el diseño de carátulas de discos e ilustraciones para diversos periódicos y revistas de prestigio.

En menos de una década Daniel Clowes ha pasado de ser un dibujante de culto a convertirse en un autor indispensable, situándose entre los grandes del cómic americano.